Es el 28 de mayo, miles de niños con sus pintorcitos de colores, las bolsitas de tela con sus nombres y la inocencia propia de los primeros pasos van al encuentro de la “seño”, las que embellecidas por su vocación de maestras, los esperan en las puertas de los jardines de infantes, para festejar juntos la fecha consensuada de su creación.
Es el homenaje patriótico a la mujer que caminando los cerros y el llano por Córdoba, La Rioja, Buenos Aires y Paraná, tuvo activa participación en la fundación de estos establecimientos escolares, es Doña Rosario Vera Peñaloza, nacida un 25 de diciembre de 1873 (día de la natividad de Jesús), en Atiles pequeña comarca de la provincia de La Rioja. Antes de entregar su tiempo, parte de la vida y su destino al servicio de la educación, se preparó convenientemente graduándose de maestra, para ejercer como profesora de jardines de infantes, sub-directora, directora e inspectora en varios colegios de distintas provincias.
A comienzos del siglo XX fundó el jardín de infantes anexo a la escuela normal de La Rioja, fue co-fundadora de la escuela Argentina modelo y de la escuela normal 9 “Domingo Faustino Sarmiento”. Dictó cursos y conferencias por todo el país y países vecinos sobre “nuevas técnicas didácticas de los jardines de infantes”. Publicó su reconocida obra “Enseñanza práctica de la geometría en la escuela primaria”, escribió algunos poemas y ensayos publicados en folletos y medios no tan conocidos, hasta que en 1924 recibió su jubilación. Pero como el cóndor no se jubila de su elevado vuelo, el Consejo Nacional de Educación la designó en 1931 para la creación del “Museo Argentino de la Escuela Primaria”, el cual dirigió durante 27 años, hasta que en 1947 dejó el cargo. En el museo hizo honor a sus ancestros y a la patria, incorporando costumbres tradicionales como la preparación de comidas típicas, trenzados, danzas folklóricas, instrumentos musicales autóctonos, creó la cátedra de estudios folklóricos por la cual los maestros aprendieron a conocer y usar elementos de la cultura nativa.
Un 28 de mayo de 1950 con 77 años de edad, retornaba a la casa del señor en Chamical – La Rioja su tierra natal. Por su impecable aporte, cargado de experiencia al servicio de la educación, por el legado y el ejemplo a las generaciones futuras, se estableció que los 28 de mayo de cada año se conmemore el “Día de los Jardines de Infantes y las docentes de nivel inicial”. Doña Rosario Vera Peñaloza, la gran maestra Riojana que desafiando las distancias, los vientos, las heladas, el sol calcinante del verano, cumplió con su vocación docente.
Con la firma de colegas, alumnos y ex-alumnos de Argentina, Chile, Uruguay y Perú, al cumplir sus “Bodas de Oro” como docente, el 11 de diciembre de 1945 le dedicaron un álbum recordatorio cuya presentación reza: “A Rosario Vera Peñaloza, espíritu superior, noble y generoso, mujer abnegada y educadora ejemplar, que se ha dado y se da por entero a la educación, sin reparar en sacrificios y sin esperar recompensas y que tiene ganado en buena ley, por su vasta cultura, su clara inteligencia y su gran corazón, el título de “Maestra de la Patria”.